Saturday, April 30, 2011

Add to Technorati Favorites

Lucia Veronica Carmona


Vivir entre dos naciones


I

En el trajín de la madrugada,

como todos los días del año

pero cada uno diferente

como diferente es la inspiración,

casi arrancada del sueño

y la tibieza de la almohada,

aún con la memoria de tu piel

en mi boca…


Me levanto en la penumbra

con la idea de cumplir,

el frío me estremece

pero sé que no estoy sola,

en medio de la sombra

desprovista de sol

me acompaña el Lucero

Venus siempre fiel,

en este amanecer de Octubre radiante

cuando el verano se despide, dándole la bienvenida

a la luz del otoño.


Por fin se adivinan

los primeros rayos,

astro rey tan necesario,

compañero apacible y cálido,

que nos despierta su luz,

mientras a la espera

de cruzar el umbral

de la subsistencia

por un dólar más

para comer

para vivir…


II

…Vivir entre dos naciones,

un puente que nos separa

para cruzarlo a diario,

como un río de agua viva incontenible

que se revela a mantenerse quieto,

y quiere romper los cauces

que le ha impuesto el imperio.

Límites imaginarios,

diques construidos por sus miedos.


Ya no ven al río de agua que los nutre

a diario con su fuerza de trabajo,

sudor y sangre que se queda

en sus restaurantes, en los campos de chile,

en sus hoteles cinco-estrellas,

sus letrinas,

sus oficinas

que no quedan quietas.

Tac, tac, tac,

del teclado de una máquina

de escribir anuncia que llegaron,

ya se enciende el neón,

“Yes, we are open”


Ciudadanos de segunda

que cumplen tareas dignamente,

pilares del consumo,

para que no se consuman pronto

en sus contradicciones,

ni se derrumben…


III

Ellos ven un enemigo en cada uno,

ya no confían en miradas inocentes,

ya no pueden encubrir la maldad

esparcida por sus mandos,

desde un pentágono

hacia cinco direcciones,

cinco continentes

que pretenden gobernar,

saben que tienen enemigos a muerte.


Ellos ya no ven al río ni a la gente.

El miedo les señala la verdad,

porque la verdad es que la gente

es como una serpiente,

que a diario entra y sale,

que espera paciente

deslizarse por entre sus trampas,

derrumbando límites

y construyendo nuevos puentes

de unidad entre hermanos

de raza ancestral,

antes separados

hoy vueltos a encontrar.


Despiertan lentamente

caminando juntos,

en un nuevo amanecer,

en medio de la madrugada

y el sueño, sin desayunar.


Es la serpiente de Aztlán

la de la profecía,

la de mil cabezas que se expande

por todo el territorio.

La que avanza desde el Sur

huyendo de sequías y miseria

desafiando discriminación.


Entra y sale para nutrirse

de valor y dignidad de un pueblo,

que tan sólo espera

recuperar lo que es suyo.

La armonía que antes

habitaba en estos

Valles y Desiertos,

la Madre Naturaleza en paz,

sin basura radioactiva,

con agua buena para beber.


Madrugada del 22 de Septiembre 2001

Con espera de 4 horas para cruzar el Puente Córdova Juárez, Chihuahua/El Paso, TX


*


Lucía Veronica Carmona es una organizadora comunitaria por los derechos humanos , poeta y cantautora. Ella es descendiente del pueblo original Raramuris y la hija de una costurera y lavendera. Lucía Veronica trabaja como líder organizadora en el Consejo de Desarrollo de Colonias en la franja fronteriza de Nuevo México y Tejas, donde ha organizado por los derechos del campesino.

No comments: